Lejos quedan aquellas primeras convocatorias del Certamen Decroly Digital que se sucedieron ininterrumpidamente desde el curso 2008-2009; decenas de alumnos de todas y cada una de las etapas educativas de Decroly han participado en el Certamen y han demostrado sus habilidades comunicativas escritas mediante trabajos de gran calidad creativa, muchos de los cuales acuñaban altas dosis de originalidad, compromiso social y belleza literaria
¡Qué orgulloso me siento! Estoy convencido que el trabajo y esfuerzo de los autores, alumnos de todos los ciclos formativos implantados en Decroly, sean de FP Básica, Grado Medio o Grado Superior, y la contribución comprometida del profesorado han ayudado a consolidar definitivamente esta actividad complementaria. No me cabe la menor duda que el Certamen Decroly Digital impulsa la mejora continua de la competencia comunicativa escrita, a la vez que atesora y fortalece algunos objetivos transversales integrados en el proyecto educativo de Decroly.
En todos estos años, desde la creación del Certamen en el curso 2008-2009, las distintas cohortes de estudiantes de este centro han encontrado un vehículo de comunicación para expresar libremente sus ideas, ilusiones y sentimientos de un tipo u otro, en su caso, impulsados por un afán colaborativo y competitivo, también, ¿por qué no decirlo? Hace unos días, el martes 16 de febrero, colgué en este blog la entrada A escribir se aprende escribiendo. Hacía alusión a la publicación de la convocatoria del VIII Certamen Decroly Digital en la web institucional de este centro. En la entradilla del escrito me referí a este evento y a su celebración anual como una oportunidad para estimular el “fomento de la innovación comunicativa entre el alumnado”. Honestamente, creo que ese objetivo ha sido conseguido por el Certamen sobradamente.
La competencia comunicativa, vista desde todas las aristas posibles en el ámbito de la comunicación oral y escrita, en sus diversos modelos y formatos, debe ser considerada en sus innumerables facetas. Las habilidades y capacidades que marcan tendencia en entornos educativos se concretan en aspectos prácticos del lenguaje, como los que incentiva el Certamen Decroly Digital. “La fluidez verbal, la originalidad, el ingenio, la creatividad, la estructura o el orden en la presentación y explicación de los argumentos”, decía en aquel escrito, cobran una relevancia prioritaria sobre otros aspectos del lenguaje que no por ser importantes, deban ser considerados excluyentes.
El Certamen Decroly Digital forma parte de todo un elenco de actividades complementarias y extraescolares que fortalecen y reafirman las señas de identidad de Decroly. En el carácter propio de este centro sobran referencias a la integración, siquiera transversalmente, de valores y de competencias relacionadas con el espíritu creativo, innovador y de mejora continua que impregnen todas las manifestaciones educativas de alumnos y profesores.
Más de cuarenta alumnos han participado en esta 8ª edición del Certamen Decroly Digital. Ana Cabello, Nieves Marlasca, Fernando Noreña y Blanca Díaz, profesores de Decroly, y Ana Isabel Muñoz e Iñigo Garbisu, alumnos de Grado Superior y de Grado Medio de Decroly han sido los nominados por el centro para dictaminar los ganadores. Ellos han conformado el jurado que ha evaluado los escritos presentados al concurso y que ha decidido los premios a los ganadores.
Han tenido una difícil tarea, estoy seguro. Hago esta afirmación porque yo he leído todas las obras presentadas y puedo testimoniar cuanto digo con conocimiento de causa. ¡Qué difícil es juzgar! En esta ocasión, como en todas las ediciones anteriores, yo he preferido permanecer ajeno a esa responsabilidad. La decisión del jurado, adoptada con criterios absolutamente independientes de evaluación y puntuación de las obras presentadas, es definitiva y no admite recurso alguno.
En el acto de entrega de premios y clausura de este VIII Certamen Decroly Digital, expresaré mi más sincero agradecimiento a todos y cada uno de los miembros del jurado por su esfuerzo y compromiso con toda la comunidad educativa decroliana. Por otro lado, respecto a los concursantes, nos veremos a las 12:00 en el salón de actos. Salvo contratiempo de última hora que se lo impida, contaremos con la presencia de la directora general de Formación Profesional y Educación Permanente, Luisa Mª Carpio Rodríguez, en representación de la Consejería de Educación, Cultura y Deporte. Al acto asistirá, también, una representación del profesorado además de familiares y acompañantes de los alumnos participantes en este VIII Certamen Decroly Digital, hasta completar el aforo del salón de actos.
Sin ánimo de ser excluyente, me permito recordar los trabajos galardonados con el primer premio en las últimas CINCO ediciones del Certamen. Todos ellos son una prueba evidente de alguna de mis anteriores afirmaciones. Os animo a entrar en ellos para disfrutar de su lectura.
- Querida yo, de Greta Galdós Serrano, ADIR, VII Certamen 2015
- Kronos, de Joan Manuel González Moreno, SMR, VI Certamen 2014
- “Make a living abroad”, Jana Diaz León, GIAT, V Certamen 2013
- Una Esperanza, de Carlos Herrero Gómez, AyF, IV Certamen 2012
- Más allá de la vida, de Laura García Gómez, GIAT, III Certamen 2011
Finalmente, quiero dejar constancia en esta entrada del extraordinario impacto de algunas obras presentadas a concurso desde sus inicios. A título de ejemplo, y al margen del premio concedido, me parece oportuno resaltar No es fácil ser joven hoy en día, de Noelia Sáiz, de primer curso de FP Básica, Informática y comunicaciones, presentado al 7º Certamen 2015 y que obtuvo el 5º premio. No es el trabajo en sí, lo que me importa. Si lo leéis entenderéis mejor por qué hago esta referencia.
En todo caso, sirvan estas líneas para respaldar especialmente a los chicos de FP Básica porque, tal vez insuficientemente atendidos por el sistema, aspiran a encontrar en Decroly los apoyos necesarios para reorientar la ruta que le guía hacía el éxito en su vida personal y profesional. Y nosotros, el equipo directivo y el profesorado… ¡en ello estamos!