Siento un placer inmenso al escribir estas líneas para presentar los discursos de los cuatro alumnos, hoy titulados, de FP Básica, Grado Medio y Grado Superior que intervinieron en la Ceremonia de Graduación de la XXXVIII Promoción de Alumnos de FP de Decroly

El acto académico, celebrado el jueves pasado, día 30 de junio, en el salón de actos del Conservatorio “Jesús de Monasterio”, acogió a los 86 alumnos que han finalizado sus estudios en este centro concertado. Asistieron al evento con sus familiares y amigos, arropados por el profesorado y personal de administración de Decroly, la directora general de Formación Profesional y Educación Permanente, Luisa María Carpio, y por la legendaria atleta santanderina Ruth Beitia, que actuó como madrina de esta XXXVIII promoción.

Como señalo en la reseña Graduación de la XXXVIII Promoción de Alumnos de Decroly, remitida a la Consejería de Educación, Cultura y Deporte, y publicada en su web institucional www.educantabria.es, el lunes 05 de julio, la ceremonia se convirtió en un acontecimiento inolvidable para los ahora titulados y para quienes directa e indirectamente hemos  contribuido a la llegada a la meta de todos cuantos conforman esta XXXVIII promoción de alumnos de Decroly. 

Sirvan estas líneas introductorias de los mensajes estudiantiles para felicitar a los graduados y, muy particularmente, a quienes han sido reconocidos por su ejemplaridad y valores sociales. Mi enhorabuena, también, a los brillantes estudiantes que obtuvieron una calificación de SOBRESALIENTE o de MATRÍCULA DE HONOR y que recibieron, asimismo, los diplomas acreditativos oportunos.

Discurso de cuatro alumnos ante el auditorio de la
XXXVIII Promoción de Alumnos de FP de Decroly

Janira Corrales Novoa, FP Básica
Graduada en Servicios Administrativos (SAD)
Título Profesional Básico en Servicios Administrativos

Buenas tardes a todos.

Me llamo Janira y acabo de terminar el ciclo de servicios administrativos de formación profesional básica. Yo aterricé en Decroly de forma casual pero una vez en este centro, me sorprendió el buen ambiente que había y el trato con los profesores. A todos ellos les quiero dar las gracias por los dos años que he pasado aquí porque me he sentido feliz, arropada y a gusto, tanto que voy a seguir con vosotros el curso que viene en grado medio.

Toda la vida he escuchado de mis profesores que tengo capacidades pero que no hacía lo suficiente. En Decroly he encontrado gente que me ha acompañado, valorado y ayudado.

Como anécdota, recuerdo con cariño como mi profesor Álvaro me “obligó” a dar clase sobre cómo envolver paquetes a un grupo de polacos que estaban en Decroly con motivo de un proyecto europeo.

Tampoco quiero olvidarme de Garnica, la empresa en la que he hecho mi periodo de prácticas. A María José, mi tutora, le quiero dar las gracias por haber depositado en mí su confianza desde el primer día.

Me despido dando de nuevo las gracias por todo y le doy la palabra a mi compañero Bruno.

Bruno Lamadrid González, FP Básica
Graduado en Informática de Oficina (IO)
Título Profesional Básico en Informática de Oficina

Buenas tardes.

Mi nombre es Bruno Lamadrid y soy alumno de Informática de Oficina. Para empezar quiero decir que mi intención es ser muy breve. Simplemente quería agradecer a Decroly el buen trato que he recibido. Recuerdo que en lapresentación del primer año Merche nos dijo que aquí los profesores eran muy cercanos. No se equivocaba. En muchas ocasiones parecían padres y en otras amigos.

También tengo que dar las gracias, sobre todo por aguantarme, a mi tutora en prácticas, Pilar Iglesias. He aprendido más de lo que me pensaba.

Hablando en nombre de mi compañeros tengo que decir que no vamos a olvidar las clases literarias de Blanca, las 4 horas infernales de los lunes y viernes de María y acto seguido las 3 de Oscar, a nuestro tutor Sergio Arroyo y sus chistes malos y, como no, a Alfonso, nuestro tutor del año pasado y persona que dio nombre a nuestro equipo en el torneo de Decroly “Torturados por Alfonso”. Tampoco vamos a olvidar al resto de profesores como Antonio, Laura, Pepe, Álvaro y Fernando.

Gracias por aguantarnos.

Muchas gracias.

Abraham Torres Borja, FP Grado Medio
Graduado en Sistemas Microinformáticos y Redes (SMR)
Técnico en Sistemas Microinformáticos y Redes

Buenas tardes.

Es un orgullo para mí poder representar a los graduados de segundo año de los ciclos formativos de grado medio y qué mejor ocasión para hacer un repaso de estos dos años.

Es curioso como el día de la presentación llega a ser una montaña rusa de emociones si, como en mi caso, eres nuevo en el centro y no conoces a absolutamente nadie. Antes de llegar estaba emocionado, pero como me conozco, sabía que me iba a poner nervioso en cuanto llegase, con lo cual tenía un plan infalible. Es la norma no escrita que todo alumno y profesor conoce: Sentarse en la última fila o, en su defecto, lo más atrás posible.

Mi plan tuvo un pequeño fallo que fue llegar tarde, y el asiento que más atrás estaba era en la primera fila lo cual no ayudaba a mis nervios. Y en general, tanto el día de la presentación como los primeros días de clase, llegan a ser complicados porque te imaginas todo lo que viene por delante, quieres saber qué asignaturas se te darán mejor y cual peor, si los dos años que están por venir se te harán largos o no, o con qué compañeros de clase te llevarás mejor.

Claro está que si ya conoces Decroly o bien empezaste con alguien que ya conocías, es como llevar ventaja en ese aspecto.

Independientemente de eso, lo que no me esperé en ningún momento es la facilidad que tiene el centro para hacer que te sientas uno más. Y cuando digo el centro, me refiero a todas y cada una de las personas que trabajan en Decroly, tanto el profesorado como la secretaria hasta el personal de limpieza; absolutamente todos los que he conocido durante estos dos años.

Pero, sin duda, lo más memorable es ver cómo compartes buenos momentos con los que son tus mejores amigos que parecen durar minutos pero que cuando te das cuenta han durado horas. Momentos en los cuales podía pasar el tiempo a la velocidad que quisiese, pero en cualquier caso siempre sentía que estaba donde quería estar, como una familia o más concretamente familia decroliana, término que ya escuché el año pasado en esta misma sala.

En cualquier caso, cada uno tendréis una historia distinta que contar, pero sin duda sé que serán buenas e inolvidables.

Y, para terminar, no me puedo ir sin agradecer a todos los profesores su ayuda, tanto en lo académico como en lo personal, y por escribir mi nombre bien en cada uno de los papeles y diplomas. Es de agradecer si estás acostumbrado a que escriban tu nombre mal con frecuencia. Y agradecer a mi madre y a mis amigos el apoyo que me han dado durante estos dos años.

Para terminar, os doy la enhorabuena al resto de graduados y os deseo lo mejor, porque hoy es un día para sentirse orgulloso.

Muchas gracias.

Gwendolyne Mejía Franco, FP Grado Superior
Graduada en Gestión de Ventas y Espacios Comerciales (GVEC)
Técnico Superior en Gestión de Ventas y Espacios Comerciales

Buenas tardes.

Estoy segura de que hemos llegado aquí por sueños, motivos e intereses diferentes. El mío ha sido, simplemente, porque me enamoré de Santander y, tras terminar otros estudios, la única posibilidad de quedarme era seguir estudiando. Encontré este ciclo y centro y vine sin saber que podría encontrarme o como podría ser.

A pesar de que comencé el curso unos días más tarde, la acogida y recibimiento fue mejor de lo que esperaba. Incluso, antes de entrar a clase, coincidí con Nora, quien hoy es muy especial para mí y quien en ese momento necesitaba una pequeña orientación para llegar al aula. Fue como una química al instante, así sonando algo cursi.

Los profesores, muy correctos y formados, se preocuparon e involucraron todo el tiempo por el bienestar de nosotros incluso, en momentos que fueron difíciles para mí, pude encontrar un hombro amigo en la profesora Marta.

Cómo olvidar las madrugadas de los viernes con las 3 horas de María y los empujoncitos que nos daba, las constantes defensas de Apple en clases de Pedro, la excelente manera de explicar de Sergio, el trato como padre y la paciencia de Antonio enseñándonos Excel, la tranquilidad y entendimiento de Carolina cuando necesitábamos un respiro mental, los tan repetidos “la matas callando” de Álvaro, nuestro tutor de segundo, y los tantos miércoles que lo volvimos loco.

Con el paso del tiempo notaba la diferencia de edad entre los de clase. Aunque hubo momentos que no fueron de color de rosa, no pasaba ni un día sin morir a carcajadas, bien por ocurrencias de nuestro compañero Álvaro, que por cierto, resultó ser el mejor comercial por su originalidad y videos de inglés en la ducha, o por el alto tono de voz de Cristina, sus miedos a los números y sus tan deseadas ganas de ser alumna ejemplar para lo que estaba dispuesta a comprar votos; bien  por el reconocimiento otorgado a Pablo de chico guapo y la habilidad de salir de los apuros en inglés; o por aquellos comentarios de humor negro de Antonio ¡esos sí que me dejaban boquiabierta!; por las introducciones creativas de Dani en las presentaciones y lo mucho que le gustaba picar a Álvaro; por las caritas de Andrea al llegar a clase y por las constantes dietas y temas de celíacos de Janire.

Eso son solo pequeños fragmentos de todos los recuerdos que me llevo de estos dos años, de lo bien que me sentí recibiendo ayuda y ayudando a los demás. Además comprobé que tengo alto nivel de paciencia. Y, por último, y más importante, que me llevo grandes amistades.

Muchas gracias y felicidades a todos por haber llegado hasta aquí.

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